La guerra en Eslovenia ( 2ª parte)

El enemigo que actua aisladamente, que carece de estrategia y que toma a la ligera a sus adversarios, inevitablemente caera derrotado

Sun Tzu: El arte de la Guerra


Cara a Cara

Los más funestos presagios no se equivocaban. Los preparativos de guerra por toda Yugoslavia no eran en balde, y el verano de 1991 trajo la confirmación, con la primera escaramuza armada. La fecha límite estaba marcada en todos los calendarios: 26 de Junio. Para ese día se esperaba la declaración formal de independencia de Eslovenia.

La cúpula militar estaba decidida a intervenir, aun sin la autorización de los restos agonizantes del estado federal, pero no se esperaba precisamente que los eslovenos adelantaran sin previo aviso la declaración 24 horas sobre lo previsto, en un primer gesto que descolocaba al JNA y dejaba una ligera ventaja estratégica inicial al gobierno esloveno, que pone en marcha su plan para controlar la república, empezando por los abundantes puestos fronterizos y el aeropuerto internacional de Brnik, en las inmediaciones de Ljubljana. La mayoría del personal de los puestos fronterizos eran eslovenos, de manera que estas acciones pudieron desarrollarse pacíficamente, simplemente cambiando los uniformes y la bandera. Ante la expectativa de un ataque del JNA, la maniobra eslovena se había asegurado unas excelentes posiciones defensivas

En imágen, policías eslovenos en un puesto fronterizo:


Durante las primeras horas del día 26, unidades del 13º cuerpo del JNA salen de su acuartelamiento en Rijeka, Croacia, para dirigirse a los pasos fronterizos de Eslovenia con Italia. Este movimiento provoca la inmediata reacción de la población eslovena, que colabora levantando barricadas y mostrando su rechazo a la demostración de fuerza del JNA. En estos primeros momentos del conflicto, ambos bandos parecen seguir una política tácita de no ser los primeros en abrir fuego.

Al día siguiente se producen más maniobras de despliegue del ejército yugoslavo: una unidad del 306 regimiento anti-aéreo, con base en Karlovac, Croacia, entra en Eslovenia por Metlika; horas después, una columna de tanques y transportes de tropas armados de la 1ª Brigada acorazada del JNA sale de su acuartelamiento en Vrhnica, cerca de Ljubljana, dirigiéndose hacia el aeropuerto de Brnik, que sería retomado por las fuerzas yugoslavas horas después. Al este, unidades del JNA salían de la ciudad eslovena de Maribor, llegando al puesto fronterizo de Šentilj y alcanzando la ciudad fronteriza de Dravograd al oeste poco después. Mientras, las fuerzas aéreas yugoslavas lanzaban en varias zonas de Eslovenia propaganda con el contradictorio mensaje de “¡Os invitamos a la paz y la cooperación!” y “¡Toda resistencia será aplastada!”

Mapa de operaciones del JNA en las primeras horas del conflicto, segun Balkan Battlegrounds, una publicación de la CIA sobre las Guerras Yugoslavas:



En una de las acciones más espectaculares de estas primeras escaramuzas, al atardecer del 27 de junio la defensa territorial eslovena derribaba sendos helicópteros del JNA sobre Ljubljana. En el aeropuerto internacional de Brnik, una unidad de la defensa territorial atacaba a las fuerzas que habían ocupado la instalación. En Trzin, un intercambio de fuego terminaba con cuatro fallecidos entre las filas del JNA frente a una en el bando esloveno, y con la rendición del resto de la guarnición. Asimismo, la TO eslovena atacaba o bloqueba las columnas armadas por toda la republica. Sin embargo, estos pequeños golpes eslovenos no habían detenido al mastodonte, y el JNA había cumplido la mayor parte de sus objetivos militares, capturando para el dia 28 todos los puestos fronterizos con Italia, todos los pasos con Austria salvo tres, y buena parte de los nuevos puestos fronterizos establecidos en los límites con Croacia. No obstante, una parte importante de sus fuerzas habían quedado en una posición vulnerable a lo largo de toda Eslovenia, y sus habitantes se habían mostrado mucho más dispuestos a defenderse de lo que la cúpula del JNA había previsto.


Desgaste

Tratándose de un conflicto tan breve, que ha pasado a la historia como desetdnevna vojna , que en esloveno quiere decir "Guerra de los diez días", el JNA sufre una desgaste bélico muy intenso que se irá manifestando progresivamente.

La debacle comienza cuando el elefante ya ha metido su enorme corpachón en la cacharrería. La misma noche del 27 al 28 de junio las fuerzas de la defensa territorial eslovena recibieron la orden de desencadenar una ofensiva general contra el JNA. Las órdenes del ministro esloveno de defensa, Janez Janša, se van repartiendo por toda la cadena de mando que inteligentemente habían ido creando con el MSNZ:

Na vseh točkah, kjer so oborožene sile RS v taktični prednosti, izvršite ofenzivne akcije proti okupatorskim enotam in objektom. Nasprotnika pozivajte k predaji, določite čim krajši rok in izvedite akcijo z vsem razpoložljivim orožjem. Pri akcijah poskrbite za evakuacijo in varnost življenj civilnega prebivalstva.

En castellano:

En todos los lugares de RS [Republica de Eslovenia] donde las fuerzas armadas tengan ventaja táctica serán llevadas a cabo acciones ofensivas contra unidades e instalaciones del enemigo. El enemigo será conminado a rendirse, de la manera más oportuna serán adoptadas las medidas necesarias para facilitar la rendición, haciendo uso de todo el armamento disponible. Durante las operaciones, se dispondrá lo necesario para la protección y evacuación de la población civil.


Los eslovenos, atacan con energía al JNA. La columna de tanques que había sido atacada el día anterior en Pesnica fue bloqueada de nuevo mediante barricadas compuestas por camiones en Strihovec, unos pocos kilómetros al sur de la frontera con Austria, y atacada por unidades de la policía y TO eslovena. Ataques aéreos organizados para apoyar a la columna emboscada en Strihovec acababan con la vida de cuatro camioneros Bulgaros. En Medvedjek, Eslovenia central, otra unidad de tanques del JNA fue bloqueada por barricadas de camiones, y la respuesta aérea mató a otros seis camioneros, que quedaron atrapados en la linea de fuego. Fuertes combates se desencadenaban también en la ciudad fronteriza de Nueva Górica, a escasos metros de la ciudad italiana de Gorizia, donde fuerzas especiales eslovenas destruían tres tanques T-55 del JNA y capturaban otros tres.

En imagen, tanques yugoslavos ardiendo a escasos metros del paso fronterizo de Rozna Dolina, en Nueva Gorica:




Otros pasos fronterizos que habían sido retomados por el JNA, como el de Holmec, cayeron durante el día en manos eslovenas. La fuerza aérea yugoslava actuó a lo largo de todo el territorio esloveno durante esta jornada, pero se dejó ver especialmente en los combates en torno al aeropuerto internacional de Brnik, donde los ataques mataban a dos periodistas austriacos y herían de gravedad a cuatro pilotos de la aerolinea eslovena Adria Airways. Asimismo, se atacaba desde el aire el cuartel general esloveno y se lanzaban otros ataques menores contra repetidores de radio y televisión en Krim, Kum, Nanos y Trdinov vrh, tratando de interrumpir las comunicaciones del gobierno esloveno. El JNA mantenía la mayoría de posiciones retomadas, pero había comenzado a perder terreno inevitablemtne. Empezaba también a tener problemas con las deserciones masivas de eslovenos adscritos, que sencillamente abandonaban las filas o se pasaban al enemigo. En este punto, tanto las tropas en el terreno como el mando central del JNA no parecía tener nada claro el siguiente paso.

Durante el día 29 se encadenan una serie de victorias militares para el bando esloveno: las tropas yugoslavas en el aeropuerto internacional de Brnik se rinden a las fuerzas eslovenas, que habían penetrado en las instalaciones a lo largo de la noche; al norte, varios tanques del JNA son capturados en Stihovec e inmediatamente reconvertidos en una compañía acorazada de la TO eslovena; fuerzas especiales yugoslavas, tratando de desembarcar en las inmediaciones de Hrvatini, son rechazadas por los eslovenos. Las fuerzas eslovenas capturan ya el 30 Junio el estratégico túnel de Karavanke, que atraviesa los alpes en dirección a Austria; nueve tanques yugoslavos son capturados en Nova Gorica, así como toda la guarnición del JNA en Dravograd: nada más y nada menos que 16 oficiales y 400 soldados rasos. La rendición de estas y otras guarniciones, como las de Tolmin y Bovec, permite que todo el equipo militar capturado sea rápidamente resdistribuido entre las fuerzas eslovenas.

En imagen, rendiciones masivas en el JNA:




Para el día 1 de Julio el mando del JNA buscaba permiso para cambiar el ritmo de sus operaciones, consciente de la inminencia de su derrota. El Ministro de Defensa Veljko Kadijević informaba al gabinete yugoslavo que el plan inicial del JNA había fracasado, y que, era el momento de poner en marcha el plan alternativo: una invasión a gran escala y la imposición de un régimen militar en Eslovenia. Sin embargo, el gabinete federal - encabezado en aquel momento por el serbio Borislav Jović - rechaza autorizar semejante operación, causando la indiganción de halcones como el General Blagoje Adzic. Para el día 2, tras continuas deserciones y golpes eslovenos, se negocia entre el JNA y la defensa territorial eslovena durante la tarde y la noche en Dravograd para lograr un alto el fuego, mientras las instalaciones del JNA a lo largo eslovenia siguen cayendo y la TO organiza exitosos ataques contra los pasos de frontera en Šentilj, Gornja Radgona, Fernetiči y Gorjansko, capturándolos y obligando a rendirse a las tropas del JNA. A las nueve de la noche, la Presidencia eslovena anunciaba un alto el fuego unilateral rechazado por el mando del JNA, que prometía "retomar el control" y aplastar la resistencia eslovena. 24 horas despues, el día 3 de Julio, el JNA aceptaba el alto el fuego y procedía a retirarse a sus acuartelamientos. El elefante huía, espantado por unos inteligentes y bien organizados ratoncitos.

Consecuencia

La baja intensidad e irregularidad del conflicto queda en evidencia ante las cifras:

El JNA sufria 44 bajas y 146 heridos, mientras que los eslovenos tuvieron 18 fallecidos y 182 heridos. Doce extranjeros murieron en el conflicto, principalmente periodistas y camioneros de Bulgaria que se habían cruzado en la línea de fuego. 4,692 soldados del JNA y 252 policías federales eran capturados por los eslovenos. Según evaluaciones de posguerra del JNA, sus pérdidas materiales equivalían a 31 tanques, 22 transportes blindados de personal, 6 helicópteros, 6,787 armas de infantería, 87 piezas de artillería y 124 armas de defensa aéreas estropeadas, destruidas o confiscadas.

La cita de "El Arte de la Guerra" de Sun tzu, que preside este artículo, se ajusta con una precisión excepcional a esta Guerra de los Diez Días. Las acciones de las fuerzas eslovenas estaban guiadas por la estrategia militar ideada algunos meses antes y estaban estrechamente integradas con un plan de gestión de medios de comunicación igualmente detallado. Un centro de medios de comunicación internacional se estableció antes del brote de conflicto. El gobierno esloveno, de forma exitosa, presentaba el conflicto como un caso de "David contra Goliat", una lucha entre una democracia emergente y un estado comunista autoritario.

En imagen, comparecencia diaria del gobierno esloveno informando a los medios internacionales:




La estrategia eslovena dependía de un cierto número de jugadas arriesgadas. Sabía que no podría haber resistido al JNA mucho tiempo si el ejército federal hubiera llevado la acción, pero sus líderes habían desanimado al mando del JNA de arriesgarse a tener muchas víctimas civiles. Tambien en el plano diplomático, el gobierno esloveno apostó que la comunidad internacional intervendría para presionar a Yugoslavia, una suposición acertada. Los eslovenos eran también muy conscientes de que, en el fondo, Eslovenia no entraba en los planes de Milosevic, dada la falta de una minoría serbia significativa en el país: el representante serbio, Borisav Jović, decepcionó al establecimiento militar declarando que Serbia no daba soporte a más acciones militares contra Eslovenia. Serbia estaba en este punto más ocupada por la situación en Croacia. El JNA, ya rehen de la doctrina pan-serbia, se estaba preparando para la inminente intervención en Croacia. Un gran convoy blindado del JNA que salía desde Belgrado a primera hora del 3 de julio, aparentemente en dirección a Eslovenia, se preparaba en realidad para un ataque inminente a la región croata oriental de Eslavonia. Se acerca la Batalla de Vukovar, que tendré el honor de acercaros en otro capítulo de este blog.


Información e imágenes cortesía del Gobierno de Eslovenia:

http://www.uvi.si/
http://www.uvi.si/10years/path/war/

asi como adicionalmente, de la enciclopedia libre de internet:

http://es.wikipedia.org/wiki/Portada